domingo, 8 de noviembre de 2015

CAP 3. DEL ESTOICISMO FEMENINO Y ALGO MAS

Corin Tellado… y otras novelas cursis

Cuando comencé el diversificado me hice el firme propósito de no enamorarme de nadie… mas nunca en la vida!!!! Y este, si fue el peor error!!! No estando mi romántico cerebro ocupado por algún idealizado protagonista, he caído en el peor de los vicios femeninos, las novelas románticas, si, esas que salen semanal y donde todas las protagonistas, bellas, inteligentes, deseables, inolvidables, sacrificadas… encuentran a un hombre que las ama por sobre todas, TODAS las cosas del universo, no hay partido de futbol o de beisbol, no hay cerveza ni whisky con los amigos, ni familia, ni nada, que le robe la atención del chico a estas protagonistas, son guapos, inteligentes, nobles, honestos, delicados, dedicados, detallistas y no viven sino para conquistarlas y cuando lo logran (y las niñas a parte se dan el lujo de hacerse las súper difíciles, al punto que se requieren 178 páginas de texto indiscriminado para que el pobre hombre les logre dar un beso) aparte están tan agradecidos que las hacen “felices” para siempre (otra vez la bendita palabrita, que parte de que “para siempre” no existe será que no podemos entender las mujeres?) como podrán suponer el siguiente protagonista participo del resumen, extracto, análisis y síntesis de esta época de mi vida, ya saben por qué había que compadecerlo ;p…
El hombre que paso a ponerle rostro a mi galán idealizado (he llegado a la triste conclusión de que tal cual como mi mama me inculco desde pequeña, he sido toda la vida “mujer de un solo hombre”, claro está, del hombre que está en mi cabeza, que en el transcurso del tiempo, haya tenido varios rostros, es otra cosa ;-P ), se llama Douglas, si me acuerdo el apellido, pero igual he decido dejarlos a todos solo con el nombre, para no herir susceptibilidades, este chico entro en mi historia sin avisar, rompiendo puertas, seguros y barreras que había puesto al corazón…o la cosa era al cerebro loco que tengo, estaba yo rondando los 17 años cuando este chico de cara redonda, melena larga castaña clara y ojos almendrados llego para protagonizar el romance más exaltado de los que ha elucubrado mi mente romántica y soñadora, recuerden, me había leído como 300 novelas jazmin, bianca, julia y pare de contar, llego este chico a mi vida para traer uno de los gustos que hasta la fecha aún perduran en mi, el Rock, he aquí a una chica de 17, sin un primer beso, que en algún momento entre los 13 y los 16 creyó firmemente que sería monja, con las hormonas desatadas, pero mil ideas preconcebidas sobre el amor ideal y como debía ocurrir cada cosa, pronto verán como esto se volvió no un triangulo, sino un pentágono amoroso...

1 comentario:

  1. Mil gracias a JP Puigbo. por colaborarme en la edicion de los textos, espero que disfruten este nuevo formato y en especial del trabajo mejorado con este lujo de editor. Gracias amigo.

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