“Quien esté libre de pecado que tire la primera piedra…” y
se hizo una montaña de ellas. Juzgar, creerse dueño de la razón, dejarnos
vencer por nuestros complejos como el “delirios de grandeza”, eres mejor que
muchos y muchos son mejor que tu, de “persecución”, seguramente muchos te harán
daño sin querer al igual que tu a otros. Jesús, que fue un gran maestro, que
vino a esta vida como otros, a dejarnos enormes enseñanzas, dijo esa frase tan
contundente, y en la parábola de la biblia, no tiraron las piedras, pero en la
vida actuar, en la vida real no dejamos de tirarlas, principalmente porque no
se cumple el único mandamiento que nos dejo, y que sustituyo a cualquiera de
sus antecesores “ama al prójimo como a ti mismo” Solo eso… nada mas eso y todo
en la vida, como la conocemos hasta los momentos, cambiaria. Y salieron
corriendo a dar amor… Y SEGUIMOS EN LO MISMO, que cual es el problema?, lee
otra vez el mandamiento “Ama a tu prójimo como a ti mismo”, no salgas corriendo
a dar amor, estarás dando para esperar recibir, estarás dando para encontrar aprobación,
estarás dando para ser reconocido y un sin fin de cosas que no son amor, y por qué?,
porque no te amas a ti mismo, es por allí que hay que empezar, amarse es
convertirte en lo que quieres ser, hacer lo que te gusta, vivir la vida como
quieres y cuando todo eso ocurra, el amar a los demás es el proceso natural,
pues no amamos en los demás el reflejo de lo que no nos gusta en nosotros, esa
es la cruda verdad. Es allí donde nos pasamos la vida juzgando, en especial a
los que hacen lo que nosotros no nos atrevemos a hacer, por eso cada piedra que
creemos lanzar es un pedazo de nuestro corazón, ese pedazo que grita “yo quiero
ser o hacer eso” pero que por miedo, por cobardía, por flojera preferimos tirárselo
a quien se atreve a ser o hacer, básicamente es por ello que la persona que
recibe la piedra y que se quiere lo suficiente para ser o hacer lo que le dicta
su corazón, se fortalece con cada “piedra” lanzada, son energía pura, la energía
que nosotros deberíamos utilizar para ser nuestra mejor versión, para amarnos
profundamente, se la regalamos a otro que si esta amándose y que seguramente te
ama, pues no hay otra salida después de que nos amamos a nosotros mismos sigue
amar a todos los demás. Esto me lleva al siguiente punto y es, pero me enojo,
pero peleo con la gente, pero a veces solo quiero estar solo o sola… y quien
dijo que hacer eso era dejar de amar?… se acuerdan de la señora esta, la que
nos pario, a la que le decimos “madre”, bueno, pues se enoja, te grita, se pone
de mal humor, necesita su espacio, tiene problemas y no nos deja de amar. Así
es el amor, es que me puedo molestar con alguien y decirle sus cuatro (ya me
conocen, en mi caso sus 300) cosas, pero aun así lo amo, el momento pasa, se
perdona pero por sobre todo se olvida, que el verdadero amor esta hecho más de
olvido que de perdón y eso lo entendemos quienes somos padres, se portan mal,
nos enojamos, lo perdonamos pero por sobre todo lo olvidamos, al punto de que
en nuestros recuerdos solo esta cuando los vimos por primera vez, no el dolor
que se paso para tenerlos o las noches sin dormir o tantas otras cosas que
molestan, que no son nada comparadas con cuanto los amamos. No sigamos tirando
nuestro corazón contra aquellos que se atreven, ni contra ninguna otra persona,
si alguien realmente hace algo que nos enoja, dígalo, supérelo, perdónelo, olvídelo
y siga amándose y amando.
PD. Mil gracias leerme. sobre el articulo coloca tu dirección de correo y en instagram están los Avatares diarios. @simplemente.isa
PD. Mil gracias leerme. sobre el articulo coloca tu dirección de correo y en instagram están los Avatares diarios. @simplemente.isa