LA HUMANIDAD Y SUS CONTRATIEMPOS

  La humanidad siempre ha mantenido un continuo y provechoso avance, sería mejor decir, un constante cambio hacia lo que considera positivo y en esa elección del camino a seguir, no ha estado exenta de errores tal y como se puede constatar al leer nuestra larga Historia. Algunas veces puede darnos la impresión de que por épocas pareciera estancarse, inclusive involucionar en algunos momentos, cuando inesperadamente se desarrollan eventos traumáticos, catastróficos, que la afectan en su casi totalidad o a un sector determinante de la población. Muchos son los sucesos y diferentes sus naturalezas, sobre todo por las causas que los generan y el grado de intensidad de la afectación que ocasionan.

  Las guerras impulsadas por la conquista de territorios, los enfrentamientos bélicos por motivos ideológicos, son las primeras causantes de los grandes cambios en la sociedad, al producir una deriva de los ejes de poder son sus consecuencias. La aparición o desaparición de países, la creación de nuevas fronteras y el dominio de los ganadores sobre los derrotados en los conflictos acarrean cambios profundos tanto en lo social como en lo económico y con el tiempo nos hemos dado cuenta de que también afectan en otros aspectos, en lo síquico, en lo cultural, etc.

  Las pandemias son otra fuente de cambios acelerados, solo hay que mirar un poco hacia atrás, tomando siempre en cuenta la población mundial para el momento, y releer las consecuencias de la primera de la cual tenemos referencia, la peste de Antonina, con unos cinco millones de muertos, pasando luego por la Peste Negra o Bubónica, con doscientos millones de víctimas, la mal llamada Gripe Española, unos cincuenta millones de muertes, solo para mencionar algunas, y la actual del Covid19 que se está desenvolviendo. Sus efectos siempre han cambiado drásticamente todas las circunstancias que rodean al ser humano, incluyendo su apreciación sobre ellas y su forma de actuar. De todas esas calamidades nos hemos repuesto y logrando salir adelante.

  Luego tenemos los cataclismos provenientes de causas que se originan en la naturaleza misma de nuestro planeta, o del espacio que lo rodea, como los cambios climáticos, caídas de meteoros, huracanes, terremotos, inundaciones, sequías, erupciones volcánicas, que en mayor o menor intensidad nos han golpeado a través de los tiempos, causándonos verdaderos estragos.

  El ser humano siempre se ha sobrepuesto y empujado por sus sueños, y utopías, ha continuado con su existencia, en la constante búsqueda de una vida mejor, de un mayor bienestar. Es en esa necesidad, en ese deseo, en ese impulso, en el cual debemos confiar y apoyarnos todos como especie exitosa, para poder afrontar con éxito el futuro que se nos presenta.

  Las personas y por tanto los países, tienen que buscar un equilibrio entre las tendencias que los guían, no se puede seguir viviendo en un mundo muy poblado, atacándose los unos a los otros, siempre al borde del caos, haciéndose la vista gorda de problemas graves como el climático. El filósofo Tzvetan Todorov, hablando sobre lo controversial de la naturaleza humana, se expresaba en estos términos: “…Los hombres-hormigas no se compadecen de la desgracia de los hombres-cigarras, a los que consideran responsables de su propio destino…El llamamiento a la moral natural no siempre basta para superar nuestro egoísmo. También puede intervenir la razón para demostrarnos que la búsqueda del interés inmediato impide defender nuestros intereses a largo plazo. El egoísmo puro destruye a los que nos rodean, y nuestra felicidad depende de ellos: necesitamos que nos quieran, como necesitamos amar...”

  Nos encontramos frente a eventos que pudieran parecernos determinantes para nuestra sociedad, de todos ellos, el más evidente es la pandemia que nos azota, que aun cuando está considerada catastrófica, la sobreviviremos sin mayores problemas. Estamos seguros de que, a corto plazo, la racionalidad se impondrá y encontrará, soluciones para el resto de los ingentes problemas que nos acechan. Tenemos que asumir que el aislamiento de la cuarentena nos ha dado tiempo para meditar sobre el futuro que nos aguarda. Jared Diamond, ganador del premio Pulitzer, expresa: "Yo espero y pronostico que el mundo aprenderá de una campaña exitosa contra el villano evidente del covid y que nosotros continuaremos con campañas exitosas contra problemas globales mayores, pero más sutiles, como el cambio climático"…"Si eso sucede, esta tragedia del covid-19 podría resultar dejando un gran legado positivo", concluye.

                                                                                     Jorge Puigbó